Maleconeando
Este es el taller que vio nacer a las pulmonías
Don Miguel Ramírez Urquijo fue quien las creó y a quien le debemos el icónico transporte
MAZATLÁN.- Una actividad obligada si visitas el puerto de Mazatlán es darte un paseo arriba de una pulmonía, sentir la brisa del mar en el rostro y admirar los monumentos que se encuentran a lo largo del Malecón.
Pareciera imposible imaginarnos Mazatlán sin este clásico transporte turístico, por ello, hoy en Punto MX te hablamos del taller que vio nacer las pulmonías.
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Te va a sonar raro e inimaginable, pero el primer taller de pulmonías estaba en las instalaciones del Teatro Rubio (hoy Teatro Ángela Peralta) aunque si somos un poquito más más específicos el lugar donde se crearon es un espacio perteneciente al Centro Municipal de las Artes (CMA).
En 1964, se destinó la sala cinematográfica para ser un taller de pulmonías, un transporte público local, y de la mano de Don Miguel Ramírez Urquijo salieron las primeras, pero no creas que eran como las actuales, se trataba de un mototaxi de tres llantas con una carreta para tres pasajeros.
Don Miguel Ramírez Urquijo, las pulmonías en Mazatlán
La idea original fue de él, un taxista que no podía conducir un auto cerrado sin aire acondicionado, con un calor externo de más de 40 grados y una humedad en el ambiente bastante alta.
Entonces, a partir de esa idea, las pulmonías llegaron para quedarse y crecer en número. Fue entonces, aquel 20 de diciembre de 1965, cuando el hoy Centro Municipal de las Artes se convirtió en el primer taller de pulmonías en Mazatlán, dejando así un legado de mucha historia.
En el edificio se puede observar una placa con la siguiente leyenda:
«Por esta puerta salieron las «pulmonías» por primera vez a prestar servicio público el 20 de diciembre de 1965. Este lugar funcionó durante diez años. El taller donde las ideó Don Miguel Ramírez Urquijo».
El taller solo duro en operación 10 años, puesto que el huracán Olivia, en 1975, arrasó con todas las instalaciones del Teatro Ángela Peralta.
Con el tiempo estos autos fueron adaptándose a cuatro ruedas hasta dar como resultado las actuales pulmonías, mismas que son construidas en talleres pequeños pero especializados.
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