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MAZATLÁN. – Dejar tu hogar para cumplir tus sueños es toda una odisea, te enfrentas al famoso “qué dirán”, sobre todo cuando tienes 19 años, es la década de los 60, y vives en Santa Catarina, Concordia, una pequeña comunidad en donde casi todos se dedicaban a la agricultura y la ganadería.  

Así, don Ángel Cruz Tirado, con sus cosas en mano, salió por una mejor vida. Quería ser abogado, sin saber leer, ni escribir, pero con muchas ganas de mejorar su situación de vida y mucho empeño, ha logrado ser uno de los restauranteros más conocidos de Mazatlán.  

“Para una persona que carece de estudios, es totalmente difícil el crecer. Yo llegué a Mazatlán con ganas de crecer y hacer algo, llegué en los 60 y el primer trabajo que tuve fue vendiendo tacos en una carreta, en Olas Altas, andaba en los 20 años”, declaró.  

Ha trabajado para la Cervecería Pacifico, en hoteles como el Belmar, Dorado; restaurantes como La Copa de Leche, el Shrimp Bucket, como ayudante de mesero, ayudante de cantinero, buscó oportunidades de arriba para abajo, agarrando experiencia, aprendiendo de las pruebas y errores, hasta que lo consiguió.  

Con el tiempo, conoció a José María Hernández, a quien recuerda por ser con quien se “graduó” como restaurantero, y al cabo de tres meses, dejó ese negocio para emprender su carrera… ahí comienza su sueño.  

Inició en sociedad con “Tres Islas”, que quebró al cabo de un año, retomándolo un año más adelante con otra sociedad más grande de algunos 6 empresarios, donde fue nombrado gerente general, a la par del restaurante El Marinero, desde ahí nace, La Costa Marinera. 

Parte de los secretos de seguir vigente, en medio de bajas y altas en el turismo, en Mazatlán y en el sector restaurantero, señaló, es saber de dónde vienes, qué has vivido y hacia dónde vas, como dicen por ahí, «nunca perder el piso».  

“Tener una gran comunicación con los empleados, no dejar la publicidad para que el nombre del negocio no caiga, le seguimos con el cuidado del servicio que se tiene que dar, la calidad del producto que se tiene, los precios, que salga para mantener el negocio y que no haya perdidas”, comentó.  

Este sábado, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados de Mazatlán, reconocerá por 50 años a Don Ángel, por su historia y trayectoria dentro del sector y que lo mantiene vigente entre el turismo nacional y el extranjero, y no sólo eso, también entre figuras famosas como actores, cantantes y hasta deportistas.  

Don Ángel no para, está en miras de abrir La Casa del Abuelo, un restaurante campestre entre Villa Unión y El Roble, donde se podrá encontrar comida a base de carne y mariscos, en un entorno campirano con amenidades que incluirán una escuela de charrería en una pequeña plaza de toros que ya se construye, pero donde adelanta, no habrá espectáculos taurinos. 

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