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CIUDAD DE MÉXICO. – En medio de la creciente escalada de violencia entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza, México anunció la implementación de un puente aéreo para rescatar a más de 700 ciudadanos mexicanos que aún se encuentran atrapados en territorio israelí.  

La decisión fue dada a conocer por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en un esfuerzo por garantizar la seguridad y el retorno de los mexicanos a su país de origen. 

Ayer, dos aviones de la Fuerza Aérea Mexicana regresaron a México después de viajar a Israel para repatriar a ciudadanos mexicanos varados en la zona de conflicto. Entre los repatriados se encontraba el equipo femenino de gimnasia rítmica, así como un total de 287 mexicanos, incluyendo niños, mujeres y ancianos. 

El presidente López Obrador informó que en los dos primeros vuelos humanitarios se dio prioridad a los niños y ancianos, y que el resto de los mexicanos que permanecen en Israel, en su mayoría jóvenes, serán repatriados en próximas misiones que llevará a cabo el gobierno federal. Mañana, se espera que nuevos vuelos partan hacia territorio israelí para traer de regreso a más connacionales. 

Sin embargo, debido a la duración del trayecto, que involucra al menos tres escalas antes de completar el viaje de ida y vuelta, el gobierno federal ha decidido acelerar el proceso de evacuación de los mexicanos atrapados en la zona de conflicto.  

Esto implicará un puente aéreo para llevar a los ciudadanos a uno o dos países seguros desde donde puedan emprender el viaje de regreso a México. Aunque no se especificaron los países seguros, el objetivo es agilizar al máximo la repatriación de los 764 mexicanos que aún se encuentran en Israel. 

Fotos: Cortesía

Tras una semana de guerra 

La guerra entre Israel y Hamás ha continuado durante una semana, desencadenada por un ataque sorpresa de Hamás en territorio israelí. Hasta el momento, se han registrado más de 2 mil muertes en ambos lados del conflicto, incluyendo bebés, cuyas muertes el gobierno israelí ha atribuido a Hamás. 

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, llamó a la población a prepararse para una «guerra larga» y prometió poner fin a Hamás, a quien responsabiliza de iniciar el conflicto. Como parte de su ofensiva, Israel ha mantenido bombardeos constantes en la Franja de Gaza, controlada por Hamás, y ha ordenado restricciones en el suministro de energía y alimentos. 

Por su parte, el presidente de Palestina, Mahmoud Abás, ha condenado la violencia contra civiles tanto por parte de Hamás como del gobierno israelí, y ha instado al «fin inmediato» de la agresión contra el pueblo palestino, donde la falta de suministro eléctrico pone en riesgo la operación de hospitales y podría llevar a un aumento en las víctimas mortales. 

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