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MAZATLÁN.- Martha tiene 38 años y entre sus múltiples talentos pinta… con la boca, para ella no hay obstáculos para demostrar que su discapacidad no es una limitante para hacer lo que más le gusta.

Martha Olivas Torres tiene parálisis cerebral, su problema es motriz, le impide usar sus manos, necesita ayuda para vestirse, comer, caminar y hasta para agarrar un pincel, por eso buscó la manera de lograr las cosas que siempre ha querido, enseñar, escribir y pintar.

“Fue estudiando en la preparatoria, la Vasconcelos, cuando conoce su gusto por pintar, mientras Blas Hernández le dio clases; para escribir se coloca algo en la frente y lo mismo hacía con el pincel y fue este maestro que la motivó a seguir, como pasatiempo y así fue”, contó su mamá, Martha Torres.

Y aunque saliendo de la preparatoria ella estudió la universidad y buscó trabajar para salir adelante, ser independiente y apoyar en casa, la pintura era algo que la llamaba, que la hacía sentir especial, así que años más tarde retomo la actividad, en clases particulares con Blas.

La técnica con la frente no estaba resultando, así que buscaron hacerlo con la boca y nunca se imaginaron que a partir de ahí, naciera en ella el deseo y las ganas de plasmar lo que veía o se imaginaba, siendo la naturaleza lo que más le gusta pintar y mezclar en colores.

Fue columnista en Noroeste

El periódico Noroeste le abrió las puertas para ser columnista, semana a semana, por 10 años, daba su opinión acerca de la inclusión y las personas con discapacidad.

Escribía sobre temas que iban relacionados a los espacios públicos, la integración en la sociedad de personas con distintas discapacidades pero siempre remarcando que no había límites, así lo hizo por 10 años hasta que se cansó.

“Ya se sentía cansada y es que al mismo tiempo, en su momento, el ex presidente Zedillo vino y ofreció plazas para personas con discapacidad y entre estos entró ella, o sea que estudiaba y trabajaba. Ya cuando dejó la columna se dedicó a dar clases y a la pintura”, dijo.

Su mamá cuenta que escribir para el periódico le ayudó a mejorar su redacción, a leer, a mejorar su habla, a saber estructurar un texto y que lo que estuviera pensando, lo pudiera redactar en una computadora.

Su integración a la VDMFK como pintora

En el mundo existe la Asociación Mundial de Pintores con la Boca y el Pie, que se encarga de apoyar a artistas con discapacidad y apoyarlos con becas para que sigan su labor artística, independientemente si tienen otra profesión.

A Martha le interesó mucho formar parte de la asociación, seguir pintando, pero le faltaba dinero para comprar materiales, seguir con sus clases, y buscando en internet e indagando dio con el contacto de su vínculo en México.

Después de varias muestras enviadas de sus obras, varias entrevistas, llamadas, correos y demás, fue aceptada en la asociación de la que forma actualmente con una beca que funciona para pagar su escuela en el Centro Municipal de las Artes y comprar materiales.

Sus obras, que ya suman más de 10, están en diferentes partes de México y el mundo, en galerías donde se demuestra que la discapacidad no es una limitante para el arte y que así como ella, hay otros más que también pintan y tienen mucho que mostrar.

Participa en tres galerías en México, dos en Jalisco, dos aquí en Mazatlán; participa en otra, con sus obras, en California, Estados Unidos; además, las pinturas nuevas que hace son enviadas a Suiza, sede de la asociación para ser revisadas.

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