Alets y la Malafama que lo llevó de bar en bar en Mazatlán

MAZATLÁN. – Los has escuchado cantar, tocar, aquí y allá, en lo que era La Copa de Leche, en el Terraza Laguna, abriendo conciertos, Alets es uno de los cantantes locales más conocidos de Mazatlán y su Malafama lo ha encaminado a eso, buscando siempre ir más allá de cantar covers.  

Alets, como se le conoce en redes sociales, es ingeniero en Informática, ¿lo sabías? y aunque la música iba de la mano, lo combinó con un trabajo de ocho horas, en un escritorio y rodeado de gente que había sumado más de 10 años en su mismo escritorio, eso le dio el impulso para tomar la decisión de intentar o quedarse más años sentado.  

Pero, el Malafama no inició con la intención de un nombre artístico, junto a un amigo y su pasión por las motocicletas, buscaban hacer un motoclub al que llamarían Malafama, pero, al usarlo como sobrenombre para identificarse, la gente lo tomó como un nombre artístico que hasta la fecha perdura.

“Trabajé en Conapesca de programador, pero llegó un punto que era la música o trabajar ahí, tuve que tomar la decisión y me decidí por la música. Lo que me dio miedo y decidirme fue que dure dos años trabajando ahí y pasaron muy rápido, me asustó porque había personas que tenían 20 o 30 años y no quería eso para mí”, declaró.  

Ya tenía la experiencia de tocar con agrupaciones, pero experimentó ser solista, ya cumplió 8 años así. Empezó en el Local, un lugar atrás del Hotel Freeman, no le fue muy bien, de ahí avanzó a la Copa de Leche, donde agarró fama y creó una comunidad con el público que era constante, de ahí en adelante, le fue cada vez mejor.  

«A mí me empezó a ir bien en La Copa de Leche. Empecé en el Local, atrás del Freeman y ahí nadie iba a verme, eran las mismas personas siempre, por azahares del destino caí en la copa de leche y ahí me empezó a ir bien, se empezó a generar una pequeña comunidad”, dijo.  

Hasta la fecha, sigue trabajando.  

Su propio estudio y sus propias canciones  

Con el tiempo logró abrir su propio estudio, para componer, trabajar en su música y sus propios videos, con la pandemia, lo abrió para otros artistas locales, que tuvieran un espacio donde cantar, que lo hicieran suyo y ha funcionado.  

La música y “el Malafama” son uno mismo, y para este 2022 hay muchos planes para que escuchemos más de él, no solo covers, sino canciones de su propia autoría.  

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