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Sinaloa y Sonora

MAZATLÁN.- Los del norte de Sinaloa usan palabras diferentes a las del centro y sur, y es precisamente por su cercanía con Sonora, pero no sólo eso, hace muchos ayeres, Sinaloa y Sonora eran uno mismo, y como sucede hasta en las mejores familias, había tensiones que terminaron en una separación y reclamación de territorios.

Aunque ya tenían un siglo siendo uno mismo, no eran oficialmente el Estado de Occidente hasta 1824, aunque realmente eran como el agua y el aceite, y así como había quienes no querían que fueran una sola provincia, había quienes sí, y esto se reflejó en la cantidad de gobernantes que tuvo.

De acuerdo a datos históricos, el Estado de Occidente tuvo 14 gobernadores en 6 años, hasta su disolución en 1830. Todos estos movimientos políticos se dieron por las diferentes fuerzas de intereses políticos y económicos.

Durante esos 6 años siendo el Estado de Occidente, sobresalieron 3 puntos: Quién debía ocupar la gubernatura, dónde debía estar la capital del estado, y si Sonora y Sinaloa deberían convertirse en estados independientes.

Por ejemplo, en ese tiempo, la capital fue El Fuerte, luego Cosalá, después Culiacán y por último Alamos, hasta que llegó la separación.

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¿Qué motivó la separación de Sinaloa y Sonora?

A parte de que la Independencia de México sirvió de inspiración, la provincia del Estado de Occidente, conformada en ese entonces por Sinaloa y Sonora, arrastraban muchas diferencias, incompatibilidad de los intereses.

Por ejemplo, se decía que el clima, los «genios» y costumbres de los pobladores eran muy diferentes, también las actividades económicas y lo que se sembraba en cada tierra, porque el Estado de Occidente era tan grande, que no podía mantenerse de un sólo gobernante y el que mucho abarca, poco aprieta.

También se decía que no era posible que se rigieran por las mismas leyes; por ejemplo, en Sonora debía haber milicias numerosas y bien armadas para defender al pueblo de los indios rebeldes y de los apaches, problema que no existía en Sinaloa, por lo que resultaba injusto obligar a los sinaloenses a pagar los gastos militares de Sonora.

Pero también había quienes abogaban porque permanecieran siendo uno mismo, porque desde hacía un siglo, en 1733, se habían regido por un mismo gobierno, que sus productos eran complementarios y que lo que faltaba a una lo suplía la otra. Entonces, era conveniente que siguieran unidas.

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¿En qué año se separan?

Después de discusiones entre los diputados locales, en 1830, un decreto expedido por el Primer Congreso Constituyente Mexicano, el Estado Interno de Occidente quedó separado; a partir de esa fecha, Sinaloa y Sonora son estados libres y soberanos.   

Una vez disuelto el Estado de Occidente, los estados de Sonora y Sinaloa procedieron a designar e instalar sus respectivas legislaturas, cuya misión fundamental fue dotar a cada entidad de las leyes necesarias para conducir sus actividades por el camino del derecho y la paz social.  

No obstante, en esta disolución, Sinaloa perdió parte de su territorio ubicado en el norte, tierras de los mayos principalmente, las cuales pasaron a formar parte del territorio de Sonora.

En ese tiempo, el Estado de Occidente se conformaba de 5 distritos, Arizpe, Horcasitas, El Fuerte, Culiacán y San Sebastián.

Sin embargo, con la separación de Sinaloa y Sonora no se solucionaron los conflictos de quienes deseaban el poder, y cada uno continuó con sus contiendas, por ejemplo, la rivalidad de Culiacán y Mazatlán, aunque eso ya es otra historia.

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