Conoce a Alfonso Rivera y su noble labor como ‘Bellboy’

MAZATLÁN. – Son las cinco de la mañana y Alfonso Rivera, de 54 años de edad, mejor conocido como “Ponchito”, se prepara para comenzar a trabajar, y aunque ya no es aquél joven de 21 años, sus ganas de salir adelante y su amabilidad siguen intactas.  

«Ponchito» tiene tres décadas de trayectoria dentro del servicio turístico, específicamente en el hotel The Inn At Mazatlan, donde se desenvuelve como capitán de botones, un oficio que desempeña con gran responsabilidad. 

El «Bellboy»

Y sí, la labor de un “Bellboy” o Botones, como le llamamos comúnmente, es de gran importancia, pues crea uno de los primeros nexos personales y emocionales al llegar a un hotel. Su trabajo es asistir y ayudar a los huéspedes con su equipaje y llevarlos a su habitación por primera vez.

Asimismo, cada vez que los huéspedes se marchan o llegan al hotel, se encargan de saludarlos, les dan los buenos días, tardes, noches y hasta madrugadas, y también les aconsejan sobre lugares cercanos para comer o sitios interesantes para visitar.  

 “A mí me gusta mucho mi trabajo. Aquí a los clientes les damos un excelente trato, a veces les damos recomendaciones e información que necesita saber. Lo mejor es cuando recibes sus agradecimientos y te hacen saber que hiciste un buen trabajo”, expresó Ponchito. 

Tener facilidad para atender a las personas y mostrarse atento y sociable son algunas habilidades que Ponchito ha adquirido durante su vida para darle al cliente un servicio de calidad, un servicio que lo haga sentir como en casa, cosas que ha aprendido en su estancia en The Inn At Mazatlan.  

Su historia 

Ponchito inició trabajando en el área de albercas, siempre mostrando eso que lo caracteriza: responsabilidad, dedicación, buen humor y amabilidad, cualidades que sus jefes notaron y que premiaron, promoviéndolo hasta lograr ser Jefe de Botones.  

Todo su esfuerzo ha valido la pena, dijo, porque considera a sus compañeros como una segunda familia y al hotel como la casa que le brindó la oportunidad y confianza para desarrollarse laboralmente.  

“Aquí somos como una familia, entre todos nos apoyamos, sí sé que alguien necesita de mi ayuda, lo apoyo. Yo le agradezco al hotel porque me ha dado la oportunidad de hacer crecer a mi familia y yo creo que eso no tiene precio, te dan todo para que comiences”.  

Considera que su trabajo como “Bellboy” le ha dejado características únicas como profesionalismo, atención a clientes, la capacidad de resolver problemas y ser creativo ante distintas situaciones que puedan acontecer y por supuesto, la más importante, trabajar siempre con una gran sonrisa.  

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