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SAN IGNACIO. – Sinaloa es rico en flora y fauna, es hogar del jaguar, una especie el peligro de extinción que vive precisamente en San Ignacio, en la Meseta de Cacaxtla y que tiene su propio museo, único en el estado y que es lugar icónico para los amantes del senderismo.  

Está ubicado en la comunidad de Cabazán, en San Ignacio, a aproximadamente 1 hora con 20 minutos de Mazatlán y a solo 25 minutos de la cabecera municipal. El lugar es pintoresco, con fotografías de este mamífero, la ruta por la que camina, vive y se reproduce y las estrategias para su conservación.  

Yamel Rubio, investigadora de la Universidad Autónoma de Sinaloa y directora del museo, explicó que hablar del jaguar es entender que coexiste entre nosotros, sobre todo, en San Ignacio, y aunque no los puedas ver a simple vista, los habitantes saben que ahí están, entre las ramas y la mejor forma de preservarlos es cuidando su entorno.  

“Saber que tenemos un museo del jaguar y que es el único, es un polo de atracción muy valioso, hemos recibido académicos, turistas mochileros para ver qué es lo que estamos haciendo en conservación, el jaguar es atractivo y la gente quiere conocer su hábitat y lo único que podemos hacer es invitarlos a que caminen por el sendero del jaguar”, declaró.  

La Meseta de Cacaxtla es una zona que fue declarada como Área Natural Protegida en el año 2000, que alberga gran parte del municipio de San Ignacio, desde la costa hasta la sierra, contemplando lagunas, esteros, senderos y otros cuerpos de agua y terrestre.  

Además de ser la casa del jaguar, habitan pájaros carpinteros, chara sinaloense, loros, tortugas marinas, urracas, coyotes y demás, logrando que sus habitantes transformen la zona sin alterar su originalidad, desde Barras de Piaxtla, hasta la cabecera municipal de San Ignacio.  

La investigadora informó que actualmente la población de jaguares se ha mantenido, ni ha aumentado pero tampoco ha disminuido, sin embargo, la tarea de conservación es constante y para ello, se requieren de esfuerzos desde la implementación de señalética y mejorar las carreteras.  

“En 2020, atropellaron a un cachorro jaguar y detonó el llamar la atención de que necesitamos señalética y estrategias que sí, que sean para la vida humana y que incluyan animales, necesitamos el paso de la fauna, necesitamos enriquecer nuestras vías para evitar accidentes, hacer estas acciones posibilita que haya menos accidentes”, dijo.  

Comentó que aún existe la cacería por trofeo y en otros casos por ganaderos que justifican sus acciones cuando un jaguar mata al ganado, sin embargo, remarcó qué hay otras opciones, como el reclamar una cantidad de apoyo de un seguro que existe con las confederaciones de asociaciones ganaderas.  

En el país existen alrededor de 4 mil 800 jaguares, San Ignacio y la zona serrana de Concordia y Rosario son parte de ello, y aunque en Concordia y Rosario no se ha decretado como Área Natural Protegida a Monte Mojino, sí mantienen programas para su conservación.  

¿Quieres ir al museo?  

Recuerda, está en Cabazán, San Ignacio, en un horario a partir de las 9:00 hasta las 17:00 horas de lunes a domingo. No olvides dejar una cooperación para que continúe su actividad para los investigadores y turistas.  

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