Maleconeando
La Isla de los Chivos, una playa sin olas ideal para los que no saben nadar
La actividad de la isla ha despuntado significativamente, entre palapas, restaurantes y actividades que se realizan en ella, poniéndola de moda entre locales y turistas
MAZATLÁN.- Si eres de los que no saben nadar pero les encanta ir al mar, ve a Isla de los Chivos, un lugar pequeño pero en el que puedes sumergirte sin preocupaciones en su playa sin olas.
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Basta con cruzar en una lancha, tal y como lo haces para ir a la Isla de la Piedra en cualquier de sus tres embarcaderos y al momento de bajar elige tu camino hacia la derecha, al topar, habrás llegado al lugar.
El boleto está en 35.00 pesos ida y vuelta, tienes varias opciones, llevar tu comida preparada, cocinarla allá o ir a uno de los restaurantes que ya están establecidos y disfrutar de sus servicios, hay gente que se lleva hasta su asador para poner carne o unos filetes de pescado a las brasas.
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Para Ana López, la isla se ha convertido en su lugar favorito, ¿por qué? Porque es un lugar seguro para sus hijos.
“Ahora que hace calor trato de traerlos aquí, porque no hay olas, porque parece alberca y puedo estar al pendiente de ellos sin peligro a que los arrastre una ola”, dijo.
También puedes acampar, muchos aprovechan la zona para instalar sus casas de campaña poco más arriba de la playa, donde la marea no logre llegar a la zona de playa, otros más, van a pescar a las escolleras, logrando así, llevarse un par de Lisas Macho para poder zarandear.
Si quieres recorrer el lugar, hazlo sin problemas, hay gente que sube el cerro y aprovecha la vista panorámica desde la cima y otros, caminan por detrás de ella, entre las rocas y se toman las mejores fotografías con la Isla de la piedra de fondo.
Hay kayaks, bananas, y un sinfín de salvavidas de todas las formas y tamaños, ya sea para venta o para renta, de unicornios, flamingos, patos y el tradicional redondo, también hay chalecos salvavidas y ropa cómoda para la playa.
Puestos de ostiones y raspados, hamacas y sombrillas para rentar si lo tuyo es la comodidad mientras te arrullas con los sonidos del mar.