AMPI Mazatlán trabaja de la mano de PC para evitar más accidentes

MAZATLÁN.- La Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) de Mazatlán busca colaborar con las autoridades para prevenir accidentes en las construcciones de la ciudad, donde se han registrado seis decesos en lo que va de 2024. Ismael Tirado Robles, presidente de la AMPI, expresó esta preocupación y el compromiso de la asociación. 

Tirado Robles explicó que Protección Civil está atenta a la seguridad de los trabajadores en las construcciones, ya que uno de los requisitos para otorgar licencias de construcción es que se cuente con las medidas de seguridad necesarias y que los trabajadores utilicen el equipo adecuado. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, han ocurrido accidentes fatales. 

«Se buscan todas las condiciones de seguridad en las construcciones debido al riesgo que implican. A pesar de contar con medidas de seguridad, aún ocurren estos accidentes. Debemos prevenirlos para evitar más pérdidas de vidas humanas. Estamos trabajando y apoyando a Protección Civil para asegurar que se cumplan estas medidas», indicó Tirado Robles. 

El presidente de la AMPI enfatizó que todos los obreros deben usar chalecos, cascos y cuerdas de seguridad, especialmente en edificios de varios pisos. Los incidentes más graves han ocurrido en construcciones de gran altura.  

Añadió que las empresas constructoras deben obligar a sus trabajadores a usar el equipo de seguridad, incluso si los trabajadores no lo hacen voluntariamente. 

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Desarrollos preparados ante huracanes  

Tirado Robles también destacó que los desarrolladores inmobiliarios en Mazatlán consideran las posibles inclemencias del tiempo, como huracanes, al diseñar sus proyectos. Manifestó que las normativas de construcción incluyen pruebas estructurales para minimizar los daños causados por vientos fuertes. 

«Las normativas de construcción consideran ciertas restricciones y fortalezas para pruebas de viento, tanto en el cálculo estructural como en los muros exteriores y ventanales», señaló. 

Aunque están preparados para posibles catástrofes como la ocurrida en Acapulco en 2023, Tirado Robles puntualizó que no se puede hacer mucho más allá de usar materiales fuertes y de calidad para minimizar los daños.  

Además, insistió en que cada desarrollador debe contratar seguros para la administración condominal, de manera que el impacto de un desastre natural se vea reducido. 

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