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MAZATLÁN.-  Los hermanos Jesús Miguel y Jesús Fernando Barraza Lizárraga nunca pensaron que sus vidas cambiarían de rumbo en tan solo quince días, después de tomar la decisión de irse a estudiar la carrera de Fisioterapia a la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), lo que sería el inicio de grandes satisfacciones a sus vidas. 

Miguel y Fernando habían egresado de la Licenciatura de Ciencias del Deporte en la UAS, y rápidamente se trasladaron a Guadalajara con una maleta llena de sueños e ilusiones, para comenzar a forjar su camino dentro de esta profesión que cambiaría abismalmente su vida.

Los cuates Barraza siempre han estado ligados al deporte, desde muy pequeños practicaron beisbol, tuvieron un paso fugaz por el baloncesto, pero la disciplina con la cual se familizaron más fue el voleibol de playa, aunque también participaron en sala o piso, y de la mano con su carrera han obtenidos logros importantes en su caminar.

“Tuvimos la oportunidad de estudiar en otras universidades, pero en una de las visitas de la entrenadora de Tecos, Mayra García, ex seleccionada nacional, hizo el comentario de llevarnos a Guadalajara y, entre pláticas, se hizo, además de que nuestros amigo y colega Marco Espinoza nos alentó a estudiar y así fue”, dijo Fernando Barraza.

La idea era clara, formarse para, en un futuro no muy lejano, atender a deportistas de alto rendimiento, pero al llegar a la Universidad se llevarían la sorpresa de que sus maestros eran doctores especialistas y de deporte, solamente vieron un bloque.

Pese a eso, las ganas siguieron firmes e intactas y todos aportaron una luz en su caminar, pues sus prácticas las efectuaron en El Consejo Estatal para el Fomento Deportivo (CODE Jalisco), y ahí comenzaron a relacionarse y aprender de lleno. 

“Cada trimestre nos pedían horas prácticas aunque no supieras nada, y nosotros por el deporte caímos al CODE Jalisco, conocimos personas y nos fuimos metiendo de lleno, después hicimos otras prácticas y nos abrió nuestro abanico de oportunidades”, expresó.

Emprendedores

Los populares cuates expresaron a Punto MX que desde que tomaron la decisión de estudiar la carrera de Fisioterapia tenían claro en poner algo en Mazatlán, aunque al principio no sabían si volverían, pero la idea sí era clara, tener en su ciudad un espacio digno.

Al pasar el tiempo dentro de la Universidad, lograron apreciar que su carrera podía ir más allá de ayudar a deportistas y decidieron emprender su propia clínica de rehabilitación, con la cual ya tiene ocho años sirviendo a atletas y a la población en general bajo el nombre Therac Center.

“Nosotros vimos un hueco y dijimos, en Mazatlán no hay una clínica que atienda en general la rehabilitación, todo lo que engloba y fue una oportunidad de volver a casa y comenzar de a poco”, expresó Miguel Barraza.

Durante los ocho años presentes ayudando a la comunidad mazatleca y nacional, han podido ser una fuente de empleo para la población local. 

Especialidades

El joven Fernando Barraza Lizarrága se encaminó en la especialidad de rehabilitación cardiaca, logró estudiar un posgrado en dicha área que lo hizo ir hasta Argentina para aprender todavía más de la materia.

“Yo en lo personal estoy viendo ahorita un número importante de pacientes cardiópatas y es una satisfacción ver como van mejorando”, externó Jesús Fernando.

Por su parte, su hermano Miguel Barraza Lizárraga, se metió de llenó en la especialidad de Osteopatía, un tipo de medicina alternativa que enfatiza una manipulación física del tejido muscular y óseo.

“Tengo dos años estudiando la especialidad, yo la conocía cuando anduvimos con los equipos de la selección mexicana de voleibol de playa, lo miré en los Juegos Panamericanos, primero con Alemán, después un brasileño, un argetino y un estadounidense y me interesó, y aquí sigo estudiando”, externó Miguel.

Atletas 

El hacer deporte toda la vida, llevó a los cuates Barraza a atender deportistas de alto rendimiento y empezar a trabajar de a poco con jóvenes deportistas hasta tocar el cielo con selecciones nacionales de baloncesto varonil, voleibol de playa en ambas ramas, así como tenistas, boxeadores, karatecas, triatletas,  entre otros. 

Satisfacciones 

Los hermanos comentaron que para ellos es muy grato poder atender desde un atleta de talla mundial hasta un menor de edad o alguna persona adulta, ya que contribuyen con ayudar a la población desde un problema de estrés, lesiones de rodilla, hasta un choque en carro. 

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