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Artesanas enfrentan la crisis… con material de desecho
Aprovechan artesanas piel y escamas de pescado, que antes era material de desecho, para transformarlos en accesorios
MAZATLÁN. En el puerto de Mazatlán, cerca de 38 personas, especialmente mujeres, han encontrado una nueva fuente de trabajo ante el desempleo pesquero: la fabricación de accesorios con piel y escamas de pescado, antes material de desecho.
Con ello, buscan enfrentar la crisis en el sector pesquero que ha dejado a cientos de pescadores sin empleo.
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La gran labor de estas artesanas, quienes elaboran desde aretes, carteras, collares y otros tipos accesorios originales, consiste en aprovechar los desechos de la pesca, mismos que transforman en artesanías.
Forman parte de un proyecto que inició en el 2018 con el respaldo de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, cuando un cierto grupo de mujeres tomó un taller curtido de piel de pescado.
Y con el paso de los años han logrado consolidar su producción, así como la expansión a otras comunidades pesqueras, como Teacapán, en Escuinapa, y Barras de Piaxtla, en San Ignacio.
El proyecto está apoyado y auspiciado por la Administración de Refugio Pesquero del Parque V. Bonfil en Mazatlán, bajo la dirección de la coordinadora el mismo Paola Luévano Carillo.
Todo sirve, nada se desperdicia
Luisa Díaz Ortiz, empacadora con más de 20 años en la industria, dijo que la piel de pescado era considerada como basura, y hoy se utiliza para productos de moda, desde bolsos hasta zapatos.
“Se aprendió a que todo se puede usar y generar más entrada económica o bien otro ingreso, se supo del proceso de curtidos de la piel de pescado y forrar los cintos, carteras, pulseras entre otras cosas”, expuso.
Señaló que el curtido de piel de especies como robalo, dorado y pargo, que antes se consideraba basura, ahora se convierte en productos de moda que generan ingresos para las familias.