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La Rosca de Reyes, ¿quién no la ha estado esperando como se espera la cena de Noche Buena? Sí, es una deliciosa tradición, sobre todo si eres amante del pan, o aunque solo lo hagas para tener una buena convivencia familiar o de amigos. 

Pero también es un momento temido por muchos, pues saben que si les toca un “Niño” o muñequito, les harán pagar por los tamales del Día de la Candelaria, el 2 de febrero. 

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Guía práctica para evitar al muñeco 

El pequeño muñeco de plástico escondido dentro del pan de la rosca, representa al niño Jesús, evocando la forma en que sus padres lo ocultaron de los soldados del rey Herodes para protegerlo de un posible asesinato. Es así como quienes tienen la fortuna de encontrar este muñeco en su porción de rosca deben vestir al niño Jesús y, posteriormente, llevar tamales el 2 de febrero, día de la Candelaria. 

Y aunque en la tradición católica encontrar al niño es un augurio de buena suerte y prosperidad, para muchos esta responsabilidad es demasiado grande y evitan encontrarse con el «muñequito». 

Si eres de los que no quiere pagar por los tamales, te tengo una buena noticia, pues hay recomendaciones muy sencillas para evitar encontrar un muñeco.  

Paso a paso 

Presta atención para disfrutar de tu porción sin sobresaltos. 

  1. Es crucial señalar que la rosca de Reyes tiene una forma ovalada, por lo que es posible que el muñeco, que simboliza al niño Jesús, se encontrará en las partes más rectas del pan, por ello las partes medias, cubiertas con la típica costra de azúcar y las favoritas de muchos, son las más propensas a albergar la pequeña figura. 
  2. Las secciones rectas de la rosca presentan una mayor probabilidad de esconder al muñeco, por lo que es prudente evitarlas si no deseas asumir la responsabilidad de vestir al niño Jesús y llevar tamales el 2 de febrero.  
  3. Las curvas del óvalo son menos propicias para contener el muñeco, ya que los panaderos tienden a evitar colocarlos allí debido a las dificultades para hornear en esas zonas. 
  4. Para disfrutar de tu porción de rosca sin la preocupación de encontrar al niño Jesús, se sugiere adoptar una táctica observadora. Procura identificar las partes donde comienzan las curvaturas del pan, lo que te permitirá iniciar el corte desde esos puntos, minimizando así el riesgo de toparse con la figura y disfrutar de tu rosca con mayor tranquilidad. 

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