Hasta por debajo de las piedras, buscan pacas para alimentar vacas lecheras

MAZATLÁN. – Los ganaderos en Mazatlán buscan hasta por debajo de las piedras pacas para alimentar a sus vacas lecheras y evitar venderlas al rastro, por la crisis de sequía que enfrentan, dijo Carlos Zataráin Páez, presidente de la Asociación Ganadera Local del municipio de Mazatlán. 

Esto coincide con la Asociación Ganadera Local de Mazatlán, quien la semana pasada declaraba una alerta de crisis por la falta de agua, obligando al sector ganadero al uso moderado de agua en pozos y a la petición urgente de las autoridades de créditos flexibles para salir adelante.  

“Estamos viendo el tema de las vacas y en Culiacán buscaremos donde conseguir pacas para traerlas a mis socios, voy a buscar, donde haya, pero como le digo, la cuestión de la leche es difícil, si no consigo pacas esto va a desaparecer”, declaró.  

Carlos Zataráin Páez
Presidente de la Asociación Ganadera Local

Zataráin Páez señaló que el último recurso que están haciendo, en este caso sus socios, es que las vacas de ordeña se están vendiendo como ganado común en el rastro, sin embargo, mantienen la expectativa y los ánimos de no llegar a los extremos y mantenerlas para seguir produciendo.  

“Es alarmante y tenemos que buscarle. Buscamos mejor precio y que gobierno federal nos ayude para cubrir esto, queremos rescatar la actividad”, dijo. 

Plagas y sequía

Muchos ganaderos también se dedican a la agricultura de temporal, el presidente de la Asociación Ganadera Local General del municipio de Mazatlán agregó que esta parte entre sus socios también está en crisis.  

“Es alarmante, la cuestión de los esquilmos es lo fuerte de nosotros por ser una zona temporalera, ahora tenemos la cuestión de la siembra que no se nos dio por las plagas, la sequía, la siembra aquí que tenemos al 100 por ciento ahorita la tenemos a un 15 por ciento de lo temporalero”, comentó. 

¿Qué son los esquilmos? 

Los esquilmos agrícolas son subproductos derivados de las actividades agrícolas, y se les considera como tal a los residuos de hojas y tallos que quedan sobre el terreno después de cosechar el grano o semilla.  

Una forma de utilizar estos esquilmos es a través de la alimentación del ganado. Las principales limitantes para usar este recurso es su bajo valor nutritivo, su escasa densidad energética y bajos niveles de consumo.