Ven el 2023 como el año de las decisiones para solucionar la crisis del agua

MAZATLÁN. – La crisis del agua es un problema mundial, según la Organización de las Naciones Unidas, más de 800 mil personas mueren cada año por enfermedades que se atribuyen directamente al agua que no es apta para su consumo.  

Por ello, este será el año del plan de acción y de estrategias para atacar la crisis del agua, durante la Conferencia de la ONU sobre el Agua 2023, que se realizará en Nueva York del 22 al 24 de marzo, pues después de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, lanzados en 2018, poco se ha avanzado.  

De acuerdo al último informe sobre el Estado de los Servicios Climáticos y el Agua de la Organización Meteorológica Mundial, los peligros relacionados han aumentado a un ritmo alarmante. Desde el 2000, las inundaciones han aumentado un 134 por ciento y la duración de las sequías un 29 por ciento. 

Recordemos que, en el Monitor de Sequía del Servicio Meteorológico Nacional, Sinaloa es uno de los estados que recurrentemente aparece con sequía severa durante los meses con altas temperaturas, especialmente entre julio y octubre.  

La asociación civil Conselva, Costas y Comunidades, en más de una ocasión, ha expresado que en el caso del río Presidio, tiene una cuenca de aproximadamente medio millón de hectáreas, pero el descuido, a causa del ser humano por su extracción irregular y degradación, han ocasionado que se tenga menos agua.  

Aun así, señaló, la población no dimensiona el problema, pues creen que el agua de la presa es infinita y, por el contrario, la presa solo es una infraestructura que almacena el agua que cae de la cuenca por arroyos y ríos.  

Y lamentablemente, el agua disponible superficial para Mazatlán se ha reducido al menos un 56 por ciento y, en 13 años más, se reducirá 10 por ciento menos a esto. 

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El agua como solución al cambio climático 

Según la ONU, el almacenamiento de carbono puede mejorarse protegiendo entornos como las turberas y los humedales; la adopción de prácticas agrícolas sostenibles puede ayudar a reducir la presión sobre los suministros de agua limpia; mientras que la mejora de las infraestructuras de abastecimiento de agua puede garantizar que todo el mundo tenga acceso a recursos vitales.  

En sus discursos, la ONU establece que las soluciones hídricas sostenibles, económicas y extendidas deben convertirse en una prioridad, pues su gestión sostenible contribuye a aumentar la resiliencia; mitigar los efectos del cambio climático, y proteger a las sociedades y los ecosistemas.  

La campaña para este año con respecto al Día Mundial del Agua lleva por lema “Sé el cambio que quieres ver en el mundo”, orillado al objetivo que buscan en esta Conferencia de la ONU sobre el Agua 2023 y que, de una vez por todas, existan estrategias firmes para resolver el problema.  

¿Qué hago yo si quiero hacer el cambio? 

Es sencillo y son actividades que normalmente podemos ir aprendiendo poco a poco: 

-Tomar baños más cortos y reducir el desperdicio de agua en el hogar. El 44 por ciento de las aguas residuales domésticas no se tratan de forma segura, ducharse menos es una forma estupenda de ahorrar este preciado recurso.  

-Participa en la limpieza de ríos, lagos o humedales locales, plantar un árbol o crear un propio jardín acuático. Estas acciones pueden ayudar a proteger los ecosistemas acuáticos de la contaminación, reducir el riesgo de inundaciones y almacenar el agua de forma eficaz 

-Hacer y crear conciencia sobre la relación fundamental que existe entre los retretes, el saneamiento y la menstruación. Rompe tabúes iniciando conversaciones en tu comunidad local, escuela o lugar de trabajo.  

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