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CIUDAD DE MÉXICO.- Tras enfrentar una batalla contra un cáncer recientemente descubierto, la actriz Kirstie Alley falleció a la edad de 71 años, informó su familia anoche a través de sus redes sociales. 

«Ella estaba rodeada de su familia más cercana y luchó con mucha fuerza dejándonos con una certeza de su inagotable alegría y de las aventuras que le esperan», dieron a conocer en un comunicado en el que describen a Kirstie como una madre increíble, feroz y amorosa. 

«Tan icónica como fue en la pantalla, fue una madre y abuela aún más increíble», continúa el mensaje. 

Kirstie es recordada por coprotagonizar junto a John Travolta la trilogía de películas de comedia «Mira quién habla», entre finales de los años 80 y principios de los 90, cintas en las que Kirstie interpretó a una madre soltera que, tras conocer a un taxista (Travolta), se convierten en una pareja. 

Fue su compañero en cámara uno de los que minutos después del anuncio tomó su cuenta de Instagram para despedirse de ella.  

«Kirstie fue una de las relaciones más especiales que alguna vez tuve. Te amo, Kirstie. Sé que nos veremos de nuevo», escribió Travolta junto a un par de imágenes de la actriz, además de compartir un fragmento de una cinta en la que aparecen bailando. 

De acuerdo con el comunicado firmado por sus hijos True y Lillie, la familia de la ganadora del Emmy (por la comedia Cheers) se dijo agradecida por el equipo de doctores y enfermeras que cuidaron de ella, y pidieron que se respete su privacidad en este momento.    

«El entusiasmo y la pasión por la vida de nuestra madre, sus hijos, nietos y sus muchos animales, sin mencionar su eterna alegría de crear, no tenían paralelo y nos dejan inspirados para vivir la vida al máximo tal como ella lo hizo». 

Gracias a su trabajo en la serie de comedia Cheers, Alley también fue merecedora del Globo de oro en 1991, premio al que estuvo nominada en seis ocasiones. 

Entre los últimos trabajos de Alley están la comedia romántica «Un accidente llamado amor» (2015) y la serie «Scream Queens» (2016), además de una participación especial en la serie «Los Goldbergs» (2019); también apareció en 75 proyectos entre cine, televisión y streaming, de acuerdo con el sitio especializado IMDB. 

Si bien en Instagram había estado alejada en los últimos meses (su última publicación la realizó en septiembre), apenas el mes pasado había usado su cuenta de Twitter para desear feliz día de Acción de gracias.  

Kirstie Alley
Kirstie Alley y John Travolta.

Carrera en el cine y la televisión

Kirstie Alley fue una de las actrices más famosas durante la década de los 80 y los 90, su talento y singular belleza la llevaron a tener una de las carreras más prometedoras del cine y la televisión, logrando protagonizar proyectos tan importantes como la serie «Cheers», donde interpretaba a la dulce Rebecca y que se convirtió, rápidamente, en un éxito en audiencia. 

Este papel le valió el personaje, que quizás el más importantes en su carrera y que sin duda le dio fama y reconocimiento internacional, el de Mollie en la saga «Mira quién habla», que protagonizó al lado del galán de Hollywood, John Travolta. 

En ese entonces, el nombre de Alley significaba un éxito asegurado, no había productor que no quisiera trabajar con ella ni programa o película que no deseara tenerla entre su elenco. Logró participar en más de 30 cintas y se ganó el cariño y la admiración del público. 

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Sin embargo, el paso del tiempo y los estragos de una menopausia temprana fueron mermando en ella, aunque siempre mantuvo la belleza de su rostro, su cuerpo empezó a cambiar y la industria le dio la espalda. 

En 2003 empezó a subir súbitamente de peso, llegando a los 110 kilos; algo que muchos tomaron como el final de su carrera. 

Pero esta sería la primera batalla de la que la actriz saldría triunfante, ya que cansada de las críticas se emprendió en escribir, producir y protagonizar la serie: «Fat Actress». 

Alley no solo se reconcilió con su cuerpo, sino que se creó su propia fuente de trabajo, pero una vez que el proyecto llegó a su fin, en 2007, vivió una nueva crisis, pues su carrera quedó en pausa por segunda vez. 

En esta ocasión la actriz se enfocó completamente en sus problemas de obesidad y tres años más tarde, en 2010, volvió a sorprender al mundo al aparecer con 45 kilos menos y una figura envidiable, que además le devolvió la seguridad en sí misma.    

En los últimos años formó parte de los realitys  «Dancing with the stars», «Big Brother UK» Y «The Masked Singer». 

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